La terapia musical, un reto de la medicina moderna

 

Beneficios de la música en la cura de enfermedades

Generales:
• Es un regulador de movimientos.
• Recrea en la persona un sentido de ritmo ordenado que posibilita controlar las palabras.
• Influye enormemente en el estado de ánimo, al penetrar en lo más recóndito de los  pensamientos y emociones, impregnando las ideas y percepciones de cada momento, sin que casi la persona se percate de ello.
• La música es una compañera de la persona que se encuentra sola y significa un momento para recordar, añorar, entristecerse o alegrarse según el tipo de música que se está escuchando.
• Atrae a las masas y una prueba de ello son los cantantes de éxito que son los que han podido llegar al corazón de multitudes y conseguir la fama.

Tocando un instrumento musical:
• Se produce en el paciente una sensación de tensión y relajación alternadas, necesarias para producir el movimiento.
• La persona que está tocando un instrumento musical se va formando la imagen previa del movimiento que producirá el sonido que espera oír.
• Ayuda a desarrollar músculos específicos.
• Contrarresta la atrofia por falta de ejercicio y retarda el progreso de la parálisis.
• Produce un efecto psicológico de sentirse capaz de desempeñar una función por sí mismo. 

Cantando:
• Mejora ciertas funciones fisiológicas como la respiración, ya que la persona recibe un adiestramiento sistemático de la respiración profunda y el dominio de la misma.
• Los niños que padecen algún tipo de retraso se alivian de sus problemas que perturban su respiración. • El sentido del oído progresa notablemente en los niños que padecen alguna otra deficiencia. 

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