Este trabajo tiene una importancia clave en estudios para evitar el desarrollo de enfermedades autoinmunes, que se presentan cuando el sistema inmunitario del cuerpo se convierte en el agresor, atacándolo gravemente en vez de protegerlo. También puede ser utilizado para exploraciones sobre la aceptación de trasplantes, y la prevención y curación del cáncer.
Aunque a este descubrimiento aún le falta desarrollo para ser aplicado en seres humanos, representa una base muy importante para futuros estudios en muchos laboratorios del mundo. Así declaró a Conciencia News el doctor Juan Martín Ilaguerri, protagonista de la investigación.
“Por ahora hemos descubierto que este circuito se activa en ciertos tumores. Es una forma de escape tumoral, que es cuando el tumor logra desarrollar mecanismos para que el sistema inmune no pueda atacarlo. Nosotros lo que hemos encontrado es una forma para acelerar este sistema”, dijo Ilaguerri.
El hallazgo supone la lectura de toda una cadena de mando en los mecanismos de las enfermedades autoinmunes. A través del estudio de una proteína, se encontró una reacción que comprobó un orden jerárquico entre los elementos que componen estos males, hasta llegar a una resolución concreta.
“Hemos juntado algunos de los mecanismos que se conocían en una sola figura”, agregó Ilaguerri, quien rescata que, tras publicarse los resultados de este proyecto, muchas instituciones científicas nacionales e internacionales han manifestado su interés de tomar este circuito inmunológico como referencia para futuras investigaciones.
“Se han abierto muchos caminos ahora, porque no podemos abarcar todos los campos, entonces habrá gente de otros laboratorios del mundo que van a enfocarse en los aspectos que a ellos les interese”.
El trabajo comenzó en el 2003 en las instalaciones del Laboratorio de Inmunogenética del Hospital de Clínicas de Argentina; y finalizó recientemente en el Laboratorio de Inmunopatología del Ibyme, construido gracias al Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet), y la Fundación Sales.
“Si bien existe amplia información sobre los mecanismos que desencadenan la respuesta inflamatoria, poco se conoce acerca de los mecanismos que resuelven esta respuesta y permiten restaurar la tolerancia o freno inmunológico. En particular, se desconoce la jerarquía de mediadores involucrados en este proceso de silenciamiento clave en nuestra evolución”, dijo el doctor Gabriel Rabinovich, miembro de Conicet y director del equipo que realizó la investigación.
Para la ejecución de este proyecto fue fundamental el uso de animales de laboratorio. El doctor Ilaguerri explicó que a veces los comportamientos en procesos in vitro (experimentos en biología celular fuera del organismo utilizando células) no corresponden a lo que se observa en organismos vivos, donde esas células tienen interacción con otras partes. Entonces se usan animales de laboratorio; y para este caso, fueron modelos de ratones.
“Todavía no lo hemos aplicado sobre seres humanos porque nos falta mucho para llegar a aplicar estos conceptos. Esto se verá en un futuro muy adelante, cuando se pueda desarrollar una terapia para poder aplicarla. Pero hemos visto que los efectos que pasan en las células del ratón, se presenta en las células de seres humanos”, concluyó Ilaguerri.
Información proporcionada por ConCiencia News