Si fallan los frenos. Bajando una cuesta, intenta frenar pero no lo consigue y el auto adquiere mayor velocidad. Lo que debe hacer: Accione el pedal del freno de forma intermitente. Aplique el freno de mano de forma progresiva y rápida, pero NO violentamente. Cambie a una velocidad menor. Si es preciso, desvié el auto fuera del camino.
Si el auto derrapa. Al ir manejando, de pronto ve un bache y gira el volante para esquivarlo y el auto empieza a derrapar. Lo que debe hacer: No pise el freno, ni levante el pie del acelerador. Gire el volante en la misma dirección en que se mueven las llantas traseras al patinar. Cuando el auto empiece a enderezarse, gire el volante en dirección opuesta. Afloje ligeramente el acelerador, disminuya la velocidad frenando suavemente. Si llegan a patinar las cuatro ruedas, suelte el freno para permitir la rotación de las mismas. Aplique luego el freno gradualmente, para evitar una volcadura.
Si un auto en sentido contrario viene contra usted. Si se proyecta hacia usted a gran velocidad, posiblemente el conductor se ha dormido o está bajo los efectos del alcohol o drogas. Lo que debe hacer: Suene repetidamente el claxon y encienda los faros. Si el otro conductor no reacciona, gire rápido a su derecha, aunque se salga fuera de la carretera. Cualquier maniobra, aun peligrosa, es menos grave que un choque de frente. Si es preciso, desvíe su auto hacia la cuneta.
Si el parabrisas se quiebra. Desconfíe de la grava y los guijarros pequeños, si dan contra el parabrisas pueden cuartearlo y volverlo opaco, quedándose sin visibilidad. Lo que debe hacer: Si se le estrella el parabrisas, déle de inmediato un fuerte golpe, abriendo así un boquete que le permita ver la carretera.