Qué es el ESC
La tecnología ESC ayudará a los conductores a mantener el control de sus vehículos durante las maniobras imprevistas en la carretera (esquivar un obstáculo en el camino, una curva), manteniendo al vehículo en la dirección deseada, aún y cuando el auto esté cerca o haya excedido los límites del camino, evitando la pérdida de control y por ende un indeseable accidente automovilístico. El ESC se basa en un sistema automático por computadora que se comunica con una serie de sensores que detectan la velocidad de las ruedas, el ángulo del volante y los movimientos laterales, al tiempo que controla individualmente el freno de cada rueda. Este proceso se produce tan rápidamente que el conductor no lo percibe. La NHTSA estima que esta tecnología en el futuro salvará anualmente la vida de unas 5,300 a 10,300 personas y evitará herida en unas 168,000 a 252,000 personas.
¿Estándar u opcional?
Actualmente la mayoría de los modelos de los vehículos en el mercado norteamericano ofrecen este dispositivo de seguridad como opcional, por lo que sólo los vehículos de lujos lo ofrecen. Entre las marcas que lo ofrecen de manera estándar en todos sus modelos son: Acura, Audi, Bentley, BMW, Buick, Hummer, Infiniti, Isuzu, Jaguar, Jeep, Land Rover, Lexus, Lincoln, Mercedes Benz, Mitsubishi, Porsche y Saab. Otras marcas como las que nombraremos a continuación lo ofrecen estándar en algunos de sus modelos y en otros de forma opcional: Cadillac, Chevrolet, Chrysler, Dodge, Ford, GMC, Honda, Hyundai, Kia, Mazda, Mercuri, Mini, Nissan, Pontiac, Saturn, Subaru, Suzuki, Toyota, Volkswagen y Volvo. El Control Electrónico de Estabilidad existe bajo diferentes nombres que incluyen: Dynamic Stability and Traction Control (DSTC), Vehicle Skid Control (VSC), Vehicle Dynamic Control (VDC), StabiliTrak, Porsche Stability Managment (PSM), Active Skid and Traction Control, Advance Trac with Roll Stability Control y Electronic Stability Program (ESP).
Si desea más información visite www.nhtsa.dot.gov
