1. No utilice sus tarjetas de crédito. Hasta que no logre salir de las deudas, evite usar crédito adicional, aunque sea para compras pequeñas. Utilice su tarjeta de débito o pequeñas sumas de efectivo.
3. Haga un seguimiento de sus gastos. Durante un mes escriba cada gasto por muy pequeño que sea. Revise sus gastos por categoría y califique lo innecesario contra lo necesario. Haciendo este ejercicio verá dónde puede cortar gastos.
4. Busque los mejores intereses. Si es un buen cliente solicite una reducción de su tasa de interés en la tarjeta que lo tenga más alta. Llame a su compañía de tarjeta de crédito con la que tiene el interés más bajo y pregúntele cuál es la mejor tasa que le pueden dar si les transfiere la deuda de sus otras tarjetas. Una buena referencia para obtener información son www.bankrate.com y www.consumer-action. Seleccione la tarjeta que le ofrezca tasas bajas por un largo tiempo y no aquellas que sólo se lo ofrecen por 3 ó 6 meses.
5. Desarrolle un plan y sígalo. Elabore un plan en el que calcule sus gastos mensuales y pueda cubrir las deudas adquiridas. Esto debería incluir un fondo de emergencia y una cuenta de ahorros para los gastos en los que incurrirá a finales del 2005.
6. Maneje todas sus deudas cuidadosamente. Cuando esté calculando cómo distribuirá su presupuesto, asegúrese de que pagará por lo menos el mínimo de lo que adeuda a las tarjetas de crédito, después páguele un poco más a las tarjetas que tienen el interés más alto.
7. Pague a tiempo. De no hacerlo le costará más que el pago de una multa por el retraso. Si es de las personas que acostumbra a no pagar en la fecha estipulada a uno de sus acreedores, cualquiera de los otros puede incrementarle su tasa de interés, así nunca le haya pagado tarde a ellos.
Si desea una entrevista confidencial en persona o por teléfono llame al (800) 750-2227 o visite www.cccsla.org.