Su siguiente ascenso fue como Superintendente de Montebello Unified School District en el Condado de Los Angeles. En esta nueva posición tuvo que enfrentarse a un grave déficit presupuestario que casi provoca una intervención estatal. Darline Robles devolvió la estabilidad económica al distrito en sólo dos años.
En 1995 tomó la posición de Superintendente de Salt Lake City School District donde logró arreglar el problema del rendimiento en las escuelas y disminuir el porcentaje de deserción escolar. La misma Darline consiguió recaudar $12 millones de la asociación Annenberg Challenge para subvención escolar y lideró la proposición de un presupuesto de $136 millones, que fue aprobado por mayoría.
Tras 30 años de exitosa carrera Darline P. Robles fue elegida Superintendente Escolar del Condado de Los Angeles en junio de 2002.
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