No eres una persona perfecta, pero sinceramente, tampoco eres solamente los errores que haces
Becky Krinsky – Life Coach
Hablar de errores es un tema complicado e incómodo, ya que muchas personas sienten que ellos son la suma de sus errores y sus desaciertos. Rápidamente se les olvida que así como han errado también han hecho muchas cosas buenas y acertadas.
Cuando uno puede reconocer que los errores son acciones que se pueden corregir o mejorar entonces se puede hace paz aceptar que son acciones que se quedan en la superficie de la persona, no quedan impregnados en el alma ni en el carácter de la misma.
Las equivocaciones hacen que uno se maltrate creyendo que es tonto, un malo o que siempre se equivoca, asumiendo que no se hace nada bien. Así, los sentimientos de culpa emergen y causan frustración, dolor e impiden volver a intentarlo. Por otro lado, los errores son buenos maestros, ofrecen lecciones que cuando se aprenden difícilmente se llegan a olvidar. Sin gratitud uno multiplica las emociones tóxicas como el resentimiento, la frustración y vive más fácilmente con depresión
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Afirmación personal para aprender de los errores
Tengo el valor para reconocer cuando me equivoco, sin tener la necesidad de maltratar, condenarme o criticarme. Equivocarse es de humanos. Aprender de los errores es de valientes. Yo soy más que los errores que hago.
Cómo se puede aprender de los errores:
1. Si haces un error no lo escondas, aprende la lección. Reconoce donde estuvo la falla, habla con la gente que te pueda ayudar, escríbelo y dale seguimiento. Acepta tu responsabilidad, no te avergüences, aprende y supéralo.
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3. Los errores enseñan y fortalecen el carácter. Cuando uno se equivoca y reconoce su error, aprende la lección y busca otra forma para conseguir lo que se busca.
Con información de www.recetasparalavida.com. EC
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