La enfermedad del hígado graso es una de las causas más comunes de enfermedad hepática en los Estados Unidos, pero hay formas de combatirla
Considere lo siguiente: la enfermedad del hígado graso afecta a aproximadamente 80 a 100 millones de estadounidenses y muchos ni siquiera son conscientes de que la tienen. Afortunadamente, no tiene que ser uno de ellos.
A través de un sencillo cuestionario de salud hepática, disponible en ThinkLiverThinkLife.org, es fácil descubrir si está en riesgo y aprender qué debe hacer a continuación. Aquellos que están en mayor riesgo de tener enfermedad del hígado graso incluyen:
• Personas con diabetes tipo 2
• Personas que tienen obesidad o un alto IMC
• Personas de la comunidad hispana y asiática
Lo que debe saber
La enfermedad del hígado graso es una de las causas más comunes de enfermedad hepática en los Estados Unidos y la causa más común de enfermedad hepática en todo el mundo, afectando a mil millones de personas. Es la forma más común de enfermedad hepática en niños en los Estados Unidos y los casos se han más que duplicado en los últimos 20 años.
Causando la acumulación de exceso de grasa en el hígado, la enfermedad del hígado graso tiene poco o ningún síntoma. Sus causas exactas son desconocidas, pero la investigación continua indica que la genética, los trastornos digestivos y la dieta pueden desempeñar un papel importante.
La investigación también indica que la enfermedad del hígado graso no es causada por el consumo excesivo de alcohol (enfermedad hepática asociada al alcohol). La esteatohepatitis no alcohólica (EHNA) es una forma avanzada de la enfermedad del hígado graso que provoca inflamación y daño hepático, lo que puede llevar a insuficiencia hepática y la necesidad de un trasplante de hígado.
Una mirada a su hígado
Un hígado sano es esencial para su salud y bienestar en general, y realiza muchas funciones necesarias, como:
• Filtrar toxinas de su sangre
• Producir bilis para ayudar en la digestión
• Almacenar azúcar para obtener energía
• Producir proteínas para el plasma sanguíneo
Además, el hígado es el único órgano sólido en su cuerpo que puede regenerarse o repararse a sí mismo, por lo que recibir un diagnóstico temprano es fundamental. A menudo, los pacientes con enfermedades hepáticas pueden revertir el daño hepático o frenar la progresión de la enfermedad con algunos pequeños cambios en su estilo de vida diario.
Cómo bajar su riesgo
Todo lo que come, respira y toca pasa por su hígado, por lo tanto, asegurar una buena salud hepática es fundamental. Puede tomar medidas para minimizar su riesgo de enfermedad del hígado graso siguiendo estos consejos simples:
• Mantenga un peso saludable
• Coma una dieta saludable
• Haga ejercicio regularmente
• Limite el consumo de alcohol
• Tome medicamentos solo según lo recetado. EC
Con información de NAPS
