Cómo aprender a distinguir estos comportamientos totalmente distintos que a simple vista se pueden confundir
Becky Krinsky – Life Coach, fundadora de Recetas Para la Vida
El amor propio es el resultado del aprecio, respeto y cuidado que se tiene hacia sí mismo. Implica aceptarse y valorarse como individuos únicos, con virtudes y defectos, y cultivar una relación saludable y positiva con uno mismo.
El egoísmo por su parte, se refiere a tener un enfoque excesivo en sí mismo y ver cómo puede satisfacer sus propias necesidades, sin tomar en cuenta las necesidades y sentimientos de los demás. El egoísmo puede llevar a la falta de consideración por los demás, por lo que tiene comportamientos manipuladores para conseguir lo que busca.
El narcisismo, por otro lado, es un trastorno de la personalidad en el cual una persona tiene una excesiva preocupación por sí misma. Los narcisistas tienden a tener una visión exageradamente positiva de sí mismos, buscan constantemente admiración y atención, y pueden explotar a los demás para satisfacer sus propias necesidades y deseos.
Afirmación positiva para cultivar el amor propio
Reconozco mi valor interno y me trato con amor y compasión en cada paso del camino. Cada día, me fortalezco y crezco, nutriendo mi ser con palabras de bondad y afirmaciones poderosas. En cada experiencia, encuentro lecciones de crecimiento y oportunidades para amarme aún más.
Cómo se nutre el amor propio:
1. El amor propio se nutre con el sentimiento de gratitud diaria. Una persona que siente que su vida es noble y buena, vive en plenitud y es un ser feliz que se puede adaptar y/o luchar ante la adversidad.
2. El amor propio es una forma sana y equilibrada que permite vivir en plenitud. Tener amor propio para reconocer cuando se tienen rasgos de egoísmo y narcisismo, fortalece los sentimientos positivos sin caer en la soberbia o la arrogancia.
3. Sentir la fragilidad propia es la esencia para tener una relación sana con uno mismo. Reconocer lo incierto, arriesgarse y exponer los sentimientos sin miedo, pena o vergüenza, hace que la persona pueda disfrutar la vida que tiene.
Con información de www.recetasparalavida.com. EC
