Un informe dice que el uso prolongado de las redes sociales puede contribuir a problemas de salud mental en niños y adolescentes, pero hay formas de evitar sus efectos nocivos
Hoy más que nunca los niños y adolescentes parecen absorbidos por el uso del teléfono, un dispositivo que pueden llevar a cualquier parte y que les permite no solo vivir conectados con otras personas, sino que lo usan casi siempre para jugar videojuegos y para interactuar en las redes sociales, ocasionando con ello posibles efectos nocivos para su salud mental.
Sin embargo, de acuerdo a la doctora Archana Dubey, Directora Médica de UnitedHealthcare de California, las redes sociales pueden volverse abrumadoras y potencialmente nocivas para el desarrollo del cerebro adolescente.
Un informe consultivo del cirujano general de los EE. UU. Vivek Murthy destaca los efectos potencialmente nocivos de las redes sociales en la salud mental de los menores de edad. Según el informe, el 95 % de los adolescentes de entre 13 y 17 años afirman usar redes sociales, y más de un tercio afirman que las usan “casi constantemente”. Además, el 40 % de los niños de entre 8 y 12 años usan redes sociales, a pesar de que la mayoría de las plataformas requieren que los usuarios tengan al menos 13 años para participar.
Según un estudio del informe, los adolescentes que pasan más de tres horas al día en redes sociales tienen el doble de riesgo de sufrir problemas de salud mental, como depresión y ansiedad. Otros problemas potenciales que se mencionan en el informe incluyen los siguientes:
• Insatisfacción con el cuerpo o comportamientos de alimentación desordenada.
• Comparaciones sociales.
• Baja autoestima.
• Mala calidad del sueño.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), 1 de cada 5 menores de edad tienen un trastorno mental, emocional o conductual, y solo un 20 % de ellos reciben atención de un profesional de la salud mental.
Estos datos pueden ser alarmantes para los padres, y resolver los problemas relacionados con el use de las redes sociales también puede parecer abrumador.
Cómo reducir los problemas de salud por el uso indebido de las redes sociales:
• Comprenda y supervise las redes sociales. Conocer un poco las aplicaciones más recientes de redes sociales puede ayudar a los padres a crear mejores límites para sus hijos. A medida que los cerebros de los menores atraviesan grandes cambios conductuales, pueden desarrollar sensibilidades asociadas con el deseo de atención y pueden tener un autocontrol subdesarrollado, en especial durante la adolescencia temprana. Los canales sociales que promueven los “me gusta” o el uso excesivo pueden representar problemas para los cerebros en desarrollo. Limite las funciones de chat, en especial con desconocidos, y restrinja el contenido inadecuado.
• Cree un plan familiar de redes sociales. Establezca pautas y límites para el uso de las redes sociales de su familia. Pueden ser expectativas acordadas de cómo debe ser el uso de las redes sociales de su familia, que incluyen límites para el uso de las pantallas, seguridad en línea y protección de la privacidad personal. La Academia de Pediatría tiene una plantilla que puede guiarlo por el proceso.
• La comunicación es clave. Inicie regularmente conversaciones abiertas, honestas y sin juicios de valor con su hijo sobre su actividad en las redes sociales. Pregúntele qué es lo ve en las redes sociales y preséntele situaciones hipotéticas para averiguar cómo responderían en diversas situaciones. Asegúrese de que conozcan los signos del ciberacoso y la permanencia de las publicaciones en línea.
• Cree zonas sin tecnología. Puede ser útil restringir el uso de aparatos electrónicos al menos una hora antes de la hora de dormir y durante la noche. Los estudios demuestran que pasar dos o más horas mirando una pantalla durante la noche puede interrumpir la secreción de melatonina necesaria para dormirse. Prohíba el uso de tecnología durante las comidas y promueva las conversaciones en persona. Aliente a los menores a crear amistades en persona y desarrollar habilidades sociales.
• Sea un modelo de comportamiento saludable en las redes sociales. Los menores a menudo aprenden mirando sus comportamientos y hábitos, por lo que usted debe limitar su tiempo en redes sociales y ser responsable con lo que elige publicar. Cuando usted esté usando su dispositivo, dígales a sus hijos lo que está haciendo.
El informe también reconoce que, además de los efectos nocivos, las redes sociales pueden proporcionar algunos beneficios. Pueden ser útiles para crear conexiones en comunidades que comparten intereses, capacidades e identidades o para proporcionar un espacio para la expresión personal. Por eso es fundamental fomentar en los menores la formación de relaciones saludables con la tecnología. EC