Después de un ataque de odio o racismo, cómo ayudar a las víctimas para sobrellevar sus problemas es un tema que requiere colaboración y trabajo en equipo.
Una publicación de la Oficina de Instituciones Democráticas y Derechos Humanos (ODIHR, por sus siglas en inglés) muestra el paso a paso a seguir para las autoridades y asociaciones.
Trabajar en equipo para las víctimas de ataques de odio requiere la suma de esfuerzos en diversas agencias de gobierno, asociaciones y organizaciones especializadas en la materia.
Pasos y recomendaciones para ayudar a las víctimas
Crear y coordinar un sistema de apoyo
Este sistema de apoyo debe crearse con organismos estatales y/o organizaciones de la sociedad civil, así como cualquier otra entidad que brinda apoyo a víctimas. De manera regular, identificar organizaciones que brinden apoyo especializado para brindarles capacitación que ayude a llenar cualquier hueco.
Estándares de calidad
Desarrollar estándares de calidad en la mayoría de servicios que se brindan para ayudar a las víctimas de ataque de odio. Proveer guía, certificar y fondear organizaciones que brinden estos servicios especiales.
Mejorar leyes
Definir y mejorar leyes y políticas especializadas en brindar soporte y atención a víctimas de ataques de odio.
Atención gratuita
Proveer servicios y protección (incluyendo refugio), asistencia médica inmediata, atención psicológica, legal, consultas y representación. De ser posible, contar con intérpretes o servicios de traducción.
Protección y atención especial para ayudar a víctimas
Las víctimas de crímenes de odio requieren tanto protección como atención especializada. La publicación sugiere que debe trabajarse en factores claves para obtener resultados positivos en la capacidad de ayudar a víctimas de odio, el servicio que se brinda y la obtención de recursos para organizaciones o asociaciones que ofrecen estos servicios.
Tener un sistema funcional, optimizado y en colaboración que pueda ayudar a la coordinación de trabajos y servicios para víctimas.
