Las conversaciones y diálogos triviales pueden sentar las bases para establecer relaciones sólidas e importantes
Becky Krinsky – Life Coach, fundadora de Recetas Para la Vida
Creer que solo se establece una comunicación profunda al hablar de temas serios y relevantes es un error común. La comunicación simple es la base para discutir y abordar temas delicados o tener conversaciones más intensas.
Compartir comentarios casuales, anécdotas divertidas o mostrar una sonrisa genuina son ingredientes importantes para cultivar la confianza y mejorar la comunicación. Estas pequeñas interacciones cotidianas crean un ambiente de apertura y comodidad, facilitando la posibilidad de ser escuchado sin temor a ser juzgado, criticado o atacado. Comunicarse de manera relajada permite expresarse con claridad y fluidez.
Es crucial tener en cuenta que cuando se dejan de compartir las pequeñas cosas de la vida diaria, los canales de comunicación se deterioran y cierran. Sin darse cuenta, la comunicación se enfría y disminuye, lo que dificulta establecer diálogos significativos cuando más se necesitan.
Afirmación personal para crear pláticas fluidas y naturales:
Soy consciente del valor de establecer y fomentar una comunicación clara y fluida con las personas que me rodean. Mi objetivo es escuchar con atención, expresarme con claridad y ser espontáneo, agradable y entretenido en mis conversaciones. Entiendo que cuanto más clara y relajada sea mi comunicación, mayores serán mis posibilidades de cultivar relaciones personales satisfactorias.
Cómo lograr pláticas naturales y fluidas:
1. Las palabras simples fomentan la comunicación fluida entre las personas. Las conversaciones triviales facilitan la comunicación cotidiana, creando pláticas serenas que fortalecen la posibilidad para poder escuchar, así se solidifican los canales del entendimiento y la buena disposición.
2. La comunicación no verbal también es una forma de entender lo que se trata de decir. A veces no es lo que se expresa con palabras, sino lo que se escucha con los gestos y el tono sutil con el que se habla.
3. Las charlas coloquiales sirven de ejercicio para aprender el arte de saber escuchar. Cuando una persona está tranquila siente confianza y libertad para poder platicar a gusto en situaciones que provocan tensión.
Con información de www.recetasparalavida.com. EC
