La mujer, su esposo y los niños

La experiencia diaria nos enseña que hay mujeres que centran su vida en torno a la educación y el cuidado de sus hijos, resultando negligentes, a veces sin siquiera darse cuenta de ello, para con el esposo. La mujer no puede creer que sólo sus hijos la necesitan. No puede dar a éstos una atención preferente, que a veces llega a ser casi excluyente, olvidando que su marido también lo reclama.