El desafío de romper el ciclo de la violencia doméstica: un testimonio
Cira Espinoza fue golpeada por su esposo desde que se casó, cuando tenía 16 años. Aunque siempre tuvo la esperanza de que la situación cambiase, nunca fue así. Incluso hasta llegó a pensar que el abuso era normal. Pero hace tres años tomó la decisión de divorciarse y, en sus propias palabras, “vivir feliz”.
Escapando de la violencia doméstica
Cada año, aproximadamente 2 millones de mujeres en los Estados Unidos son atacadas física o sexualmente por su pareja. La violencia doméstica suma un 22% de todos los crímenes violentos cometidos contra las mujeres y afecta a todas por igual sin distinción de clase social y origen étnico.
Cómo distinguir el abuso
Las mujeres víctimas de esta situación pueden experimentar violencia física como: empujones, patadas, cachetadas, golpes; o ser amenazadas o atacadas con cualquier tipo de arma. También pueden ser víctimas de abuso sexual. No hay que olvidar el abuso psicológico o emocional, que se da cuando se humilla a la persona diciéndole nombres o frases hirientes o cuando se le amenaza con hacerle daño; también cuando se le prohíbe por la fuerza ver a familiares, amigos e ir al trabajo; cuando se le priva de comida, dinero, transporte, medicamentos y acceso a servicios de salud.
Mes de concientización de la violencia doméstica
La violencia doméstica es una situación que ocurre en el seno de algunas familias con lamentables consecuencias que involucran a más de un miembro del grupo familiar. Debido a los casos que se registran, varias asociaciones a nivel nacional se han unido para impedir que se continúe deteriorando el núcleo familiar. Desde 1981 se iniciaron acciones que dieron como resultado que en octubre de 1987 se celebrara por primera vez el Mes de Concientización de la Violencia Doméstica, fecha en la que también se inició el servicio de la primera línea nacional gratuita para denunciar este tipo de delito (1-800-799-SAFE /7233).
STOP a la violencia doméstica
Recientemente el Distrito del Condado de Riverside ha llegado a un compromiso con la compañía de teléfonos inalámbricos Verizon, con el fin de ayudar a aquellas familias que sufren de violencia doméstica en el hogar. Verizon recolectará teléfonos que los usuarios no utilicen y los dotará de minutos gratis para llamar al centro Victim Witness Asistsance Center and Partners que depende del organismo Family Justice Center Project, amparado a su vez por la fiscalía del distrito.