Maribel Serrano está trabajando en un documental sobre la vida de una joven bajo el programa DACA que pudo volver a su tierra
Basta con mencionarle Jalisco para que las lágrimas se asomen al balcón. Le hicieron falta 25 años de sus 29 de existencia para poder regresar a su tierra natal, al pueblo que sus padres decidieron abandonar en busca de un futuro mejor, y ahora lo ha conseguido gracias a un perdón temporal dentro del programa que le ha abierto un camino hacia un futuro mejor como inmigrante indocumentada, el DACA (Deffered Action for Childhood).
Maribel Serrano volvió y no pudo evitar echarse a llorar. «En cuanto tocamos tierra con el avión sentí algo diferente», explica ya con las lágrimas brotando. «Ha sido un sueño hecho realidad. Volví a Colotlán en Jalisco para aprender mucho sobre mis padres, sobre su acento», todo ello recogido en un documental que quiere que vea la luz a través del crowdfunding, es decir, con una recogida de fondos que le permite producir todo lo que grabó en México.

Su intención es hacer salir de las sombras a miles de personas como ella. Serrano cruzó la frontera con solo 4 años y tiene un complicado camino hacia la legalización. La aprobación del DACA de manos del presidente Obama en 2012 le dio la oportunidad de tener un permiso de conducir y otro de trabajo, aunque de ahí a tener un pasaporte estadounidense hay un largo camino.
Su documental, Mi vida DACA, puede ser una forma de demostrar su talento y obtener una visa. Quién sabe. De momento se dedica a contar su historia, como una joven que cursó sus estudios en Los Angeles y que comenzó a sentir la presión de no tener papeles cuando estaba en la preparatoria.
«Ahí me afectó de forma mucho más tangible porque mis amigos se empezaban a sacar el carnet de conducir y conseguir trabajo, y me sentí como una perdedora por no poder hacerlo. Fue un asunto difícil de lidiar», explica.
Pero ahora sabe que eso no es así y que merece la pena seguir adelante defendiendo los derechos de los inmigrantes y tratando de humanizar más su situación. «Ahora me siento como un híbrido, una mezcla porque soy americana pero al mismo tiempo tengo la pasión por la comunidad latina y por entender más mis raíces. Creo que encajo bien en los dos mundos».
El objetivo es la nacionalidad para poder volver a Jalisco cuando le plazca. Aunque lleva toda la vida del otro lado de la frontera, la tierra llama, y mucho.
Para donar fondos a la causa de Maribel Serrano, puede visitar la página Mividadaca.com. EC